POR JOSEPH BRUSUELAS

Ingresos y ganancias fuertes, a pesar de los riesgos subyacentes

LA CONFIANZA DE LAS EMPRESAS MEDIANAS disminuyó en el tercer trimestre de 2019 a 129.4 desde 132.3 en el período anterior, de acuerdo al RSM US Middle Market Business Index, a medida que el crecimiento económico global general se desaceleró, el sector manufacturero continuó contrayéndose y los aranceles comenzaron a afectar los resultados de las empresas. Mientras que en el trimestre actual la confianza se mantiene sólida, los indicadores prospectivos en los subíndices de la encuesta denotan cierto riesgo para las empresas medianas en los próximos meses.

Es importante tener en cuenta que la encuesta MMBI del tercer trimestre se realizó antes de la escalada más reciente de la guerra comercial entre los Estados Unidos y China, el impacto resultante en la cadena de suministro global y el consiguiente endurecimiento de las condiciones financieras reflejado en la disminución en los precios de las acciones, inversión de la curva de rendimiento y una ampliación de los diferenciales de créditos en el mercado de bonos. Estos desarrollos pueden causar un mayor deterioro en la confianza de las empresas medianas en los próximos trimestres.

El mayor nivel de preocupación en torno a la dirección de la economía es más notable en el número relativamente bajo de ejecutivos de empresas medianas que indicaron que esperan aumentar los desembolsos de capital en inversión, una señal reveladora del elevado “impuesto de incertidumbre” resultante de la inestabilidad en el ambiente macroeconómico.

En el trimestre actual, el 49% de los ejecutivos encuestados dicen que esperan aumentar el gasto de capital durante los próximos seis meses, en comparación con el 51% del año anterior. Mientras tanto, el 44% aumentó los gastos de capital en el trimestre actual, subiendo ligeramente del 41% hace un año y el 39% en el período más reciente.

RSM Índice de negocios del mercado medio de Estados Unidos (MMBI)


AUN CON EL CRECIMIENTO MODERNO EN LA ECONOMÍA QUE PROBABLEMENTE DEFINIRÁ LA SEGUNDA MITAD DE 2019, LAS EMPRESAS MEDIANAS DEBEN EMPEZAR A PARTICIPAR EN EL TIPO DE PRUEBAS DE ESTRÉS Y MODELACIÓN FINANCIERA DE SUS BALANCES CONSISTENTES CON LAS ÚLTIMAS FASES DE CICLOS COMERCIALES PASADOS.


En combinación con el 42% de los ejecutivos que notaron una mejora en la economía en el trimestre actual y el 46% que esperan una mejora continua en los próximos seis meses, está claro que el riesgo de deterioro en la confianza de las empresas medianas es elevado en el futuro cercano.

Incluso con el modesto crecimiento en la economía que probablemente definirá la segunda mitad de 2019, las empresas medianas deberían comenzar a participar en el tipo de pruebas de estrés y modelado financiero de sus balances consistentes con las últimas fases de los pasados ciclos económicos. Dados los elevados riesgos en la economía global, que se han extendido a la industria manufacturera de los Estados Unidos y pueden extenderse en breve al sector servicios de Estados Unidos, el camino prudente hacia adelante implica la planeación para un final prematuro del ciclo económico actual.

Enfoque en la confianza empresarial

La desaceleración de la economía y el aumento de las tensiones comerciales subrayan la importancia de monitorear la confianza de las empresas y los consumidores. La pregunta sigue siendo si los eventos recientes conducirán a un deterioro aún mayor en la confianza, lo que a su vez afectará la actividad económica general. Durante los posibles puntos de inflexión económica, la confianza empresarial adquiere una importancia creciente y puede proporcionar una señal de alerta temprana de una mayor desaceleración en los gastos de capital, contratación y niveles de sueldos.

Si bien la confianza empresarial de las empresas medianas registrada en el MMBI no implica un riesgo a corto plazo de una mayor desaceleración, permaneciendo muy por encima de los niveles consistentes con una recesión económica, la relajación en los subíndices MMBI en relación con la línea superior denota cierto riesgo inminente.

Estos indicadores económicos prospectivos reflejan la desaceleración más amplia del crecimiento: los ingresos, las ganancias netas, la contratación y los desembolsos de capital planificados se debilitaron en el tercer trimestre en comparación con el año anterior; los inventarios, las compensaciones y los préstamos estaban estancados.

Implicaciones de la política

Los resultados de la encuesta del tercer trimestre de MMBI son consistentes con otras encuestas de opinión empresarial y a Directores, así como con nuestro propio Índice RSM US Manufacturing Outlook Index, que refleja una recesión continua en los sectores automotriz y aeroespacial. El sector manufacturero representa esa parte de la economía con la mayor exposición a las perturbaciones mundiales causadas por la guerra comercial y la volatilidad en los mercados de divisas.

La economía global se está desacelerando a un ritmo mucho más rápido que el de la economía de Estados Unidos, y ahora está claro que la manufactura mundial, que se entrelaza con cadenas de suministro de largo alcance, está en recesión. La exposición a este sector probablemente conducirá a un ritmo de crecimiento más lento en los próximos trimestres, así como a una posible propagación al sector servicios, a menos que haya un cambio significativo en la política comercial. Un indicador clave del desempeño del sector servicios, el Índice ISM Nonmanufacturing Index ISM, muestra que los servicios ahora están creciendo a su ritmo más lento en una década.

En ausencia de un error mayor de política en el comercio, cambios significativos en las tasas de interés o un shock exógeno en los mercados de energía, nuestro pronóstico indica que no habrá recesión en 2019; sin embargo, enfatizamos que los riesgos de una recesión económica en los próximos 12 meses ahora son elevados.