22 de enero de 2023

Publicado en El País

 

Una consecuencia colateral de la actividad de la inspección es el impulso del derecho a la desconexión digital, opina Javier Mourelo, director de personas de RSM Spain, una firma de auditoría y asesoría de empresas.

 

Más allá del temor a las posibles multas por incumplir la legalidad vigente, el sector de los servicios profesionales se enfrenta al reto de adaptarse a las condiciones que reclaman los trabajadores para conseguir atraer y retener al mejor talento. La lucha en este terreno, reconoce Javier Mourelo, “es cada vez mayor”. Desde hace dos o tres años hay “más ofertas de empleo cualificado que demandantes con el perfil de competencias y conocimientos necesarios”.

 

Las firmas que no se adapten a este cambio estructural, opina Mourelo, “tendrán enormes dificultades”. Para posicionarse, señala, deben ser atractivas y ofrecer flexibilidad “de verdad” y premiar a sus mejores profesionales. El director de personas en RSM también advierte de que hay que “vigilar muy de cerca los niveles de rotación”. Con este horizonte, Mourelo augura que la desconexión digital real llegará al sector antes de cinco años. Del Coto, en cambio, se muestra “moderadamente escéptica” sobre un cambio drástico, pues “lo que subyace bajo esta cultura es una rentabilidad por profesional inigualable”.

Autor

Javier Mourelo
Director de personas en RSM Spain