Sí, desde hace tiempo no es una opción. Tu empresa tiene que desarrollar un protocolo interno que establezca qué uso pueden hacer tus empleados de los medios informáticos que se ponen a su disposición para trabajar (ojo, y dar participación a los representantes de los trabajadores al hacerlo)

 

Con estos protocolos identificamos las reglas del juego: informamos a quienes podrán usar los medios informáticos de lo que pueden y no pueden hacer con ellos, establecemos los límites para su uso y, sobre todo, determinamos la forma y los medios de control empresarial de su uso.

Así, rompemos, en términos más jurídicos, la expectativa de intimidad en la utilización de estas herramientas que se puede tener por quienes hacen uso de ellas.

 

Además, de conformidad con la regulación actual en materia de protección de datos de carácter personal, es imprescindible que tu política de uso de medios informáticos cumpla estrictamente con las exigencias establecidas en la normativa de dicha materia, teniendo el respeto al derecho a la intimidad de los trabajadores y a la seguridad en el tratamiento de los datos personales de terceros como principal prioridad.

 

Por ello, no solo es importante tener un buen asesoramiento laboral para su elaboración, sino que es crucial su revisión desde un punto de vista global de cumplimiento de las políticas de protección de datos, así como desde el punto de vista de los sistemas de información que se tengan ya implantados o se vayan a implantar en cada empresa.

 

Y es que, en un momento donde las obligaciones corporativas aumentan exponencialmente, debemos asegurar que cuando cumplimos con una de ellas, no olvidamos otras igualmente importantes.

 

No hay que olvidar que un protocolo de actuación, si no está hecho a medida, no cumplirá su finalidad. Es fundamental elaborar una política interna que se ajuste a las necesidades de tu empresa y que prevea las alternativas adecuadas en función de sus particularidades.

 

Confeccionar adecuadamente tu protocolo interno de uso de medios informáticos, no sólo implicará un beneficio desde el punto de vista de compliance laboral para tu Empresa, sino que podrá suponerle una mayor protección y reportarle beneficios en su imagen de marca en el mercado, pudiendo situarla como referente de modernidad en el sector en el que opere.

 

 

Autores: Borja García, socio de RSM Spain, y Sandra Muñoz, abogada de RSM Spain.